lunes, 19 de noviembre de 2018

Y un día le escribí casi una carta de amor


Cuánto te han lastimado en esta vida para que siempre elijas ponerte a la defensiva
Cuánto dolor te han provocado como para cerrarte a los sentimientos de los demás
Cuántas veces te han hecho callar que has llegado a elegir no tener un diálogo tranquilo
Cuántas veces te han intentado manipular que no distingues lo que es un pedido
Cuántas veces habrán rechazado tu amor para que hoy no te permitas sentirlo ni mostrarlo
Cuántas veces no reconocieron que tenías razón que hoy ni siquiera te das permiso para dudar si la tienes

Cuántas veces te han lastimado para que hoy no sepas pedir perdón

lunes, 9 de abril de 2018

Una inválida a la espera

Y sí, depende de otros, como casi siempre. Depende de que algún burócrata decida que no es problema autorizar un papel.
Tienen cuatro días para responder, mañana es el segundo (o el tercero?)
Pero yo necesito saber, necesito que para el quinto día esté todo definido, porque será viernes, y en fin de semana no se puede hacer nada.
Y si ese burócrata decide autorizar, el lunes entro al quirófano, por fin; o no, depende de alguien que no entiende lo que pasa.
Y lo que pasa es que no puedo estar parada 15 minutos, no puedo caminar una cuadra, no puedo salir de mi casa.
El dolor me está matando.
Por supuesto que estoy tomando el más fuerte analgésico que puedo tomar sin estar internada, y aún así hay momentos en que me pongo en cuclillas y quiero llorar del dolor.
Así que no, no tengo miedo de la operación aunque el post operatorio sea largo y difícil. Saltaría dentro del quirófano en este momento si me dejaran.
Así que hoy, aparte del dolor, lo único que me importa es que ese burócrata, a quien no conozco ni él a mí, que no sabe lo que me está sucediendo, de pronto tenga una iluminación y resulte que, sin demorarse los cuatro días de que dispone, decida que sí, que el lunes me pueden operar.

sábado, 17 de febrero de 2018

Odio mi cuerpo

Ok, no tengo 22 años, tampoco 32, pero hay cosas que me cuesta aceptar
Entiendo las facturas que uno tiene que pagar, pero no quiero pagar por las ajenas (como si pudiera elegir...)
Y sí, hace más de dos años que ya venía "bromeando" con "... como veían que resistía, fueron a llamar a otro elefante", y sí, también entonces el cuerpo me pasó factura
Y no, no pude elegir, no pude no hacer lo que tenía que hacer, y ahora, al sacarme la armadura que necesité tener puesta, pues toca pagar los platos rotos de la gira
Hoy, aparte de las "pequeñeces" que voy encarando y curando, me encuentro con una realidad que lamento, que odio y que tengo que aceptar
No, ya no voy a poder bailar, no voy a poder patinar, no voy a poder... etc y etc
Y hoy, encima, me siento una inválida, una discapacitada que necesita ayuda para un montón de cosas cotidianas, o que sufre al hacerlas, o que directamente no hace
No creo en el karma, pues si de karma se tratara, me parece que la vida me queda debiendo